El precio de despedir a altos directivos

Los contratos de los altos directivos establecen un vínculo particular entre los contratados y el empleador. Estos contienen tanto beneficios especiales como responsabilidades y obligaciones inherentes al cargo, las cuales tienen su base en la mutua confianza, y se regulan a través del Real Decreto 1382/1985, de 1 de agosto. 

Desde luego, esta normativa también expone el procedimiento a seguir cuando por alguna circunstancia se requiere extinguir el contrato. Esto puede suceder por voluntad del alto directivo o por despido, Si este es el caso, lo ideal es contar con la asesoría de un buen despacho de abogados laborales

Si te encuentras, por ejemplo en la localidad de Barcelona, y necesitas localizar abogados Barcelona, puedes contar con el despacho de Forcam Abogados, quienes entre otras cosas, se especializan en despidos. 

¿Cuáles son los motivos para extinguir un contrato de altos directivos?

Un contrato de alta dirección puede terminar bien porque se ha establecido una fecha para su finiquito o porque las partes involucradas desean culminar su relación laboral. En este caso, existen varias modalidades, que van desde el acuerdo mutuo de las partes hasta la decisión unilateral de extinguir el contrato. 

Cuando la decisión viene por parte del contratado, las razones pueden ser personales, y el trabajador deberá cumplir con lo estipulado en el contrato, a fin de compensar a la empresa. Por su parte, la empresa también puede tomar la decisión de dar término a la relación laboral, apoyándose en motivos que también están amparados en la ley. 

Estas causas abarcan desde el incumplimiento grave y culpable, despido objetivo, jubilación o cualquiera que se haya acordado previamente en el contrato. Un punto importante a resaltar es que, de acuerdo a las leyes, ambas partes se reservan el derecho de terminar en contrato de forma unilateral sin tener que alegar ninguna causa

¿Qué es la indemnización en un contrato de alto directivo? 

Cuando la extinción del contrato proviene por parte de la empresa, el alto directivo tiene derecho a cobrar una indemnización. Esta dependerá de los términos establecidos en el contrato, más los estipulados en el Estatuto de los Trabajadores. 

Entre los puntos a tomar en cuenta, se encuentra el preaviso, que no es otra cosa que la notificación por parte de la empresa, de la culminación anticipada del contrato. Este debe ser con un período de tres meses, a menos de que el contrato establezca otros términos, pudiendo abarcar desde seis meses hasta cinco años. 

Desde luego, existe un buen número de variaciones dentro del cumplimiento de estas cláusulas contractuales y artículos de ley. Por ejemplo, si existe un incumplimiento de esta cláusula por parte de la empresa, la misma deberá dar una indemnización al trabajador que corresponda con el salario que cubra el período de preaviso incumplido. 

Es por ello que en caso de estar frente a una ruptura de la relación laboral, lo más recomendable es recibir la asesoría legal especializada en el tema. 

¿Qué es la cláusula de blindaje?

Como ya hemos mencionado, la empresa está en la obligación de dar a alto directivo una indemnización, en caso de despido. Ahora bien, muchas empresas plasman dentro de los contratos lo que se conoce como cláusula de blindaje

Esta se refiere a un acuerdo establecido entre las partes y que queda por escrito dentro del contrato. En dicho acuerdo se determinan las cantidades que cubrirán la indemnización, adjudicando cantidades determinadas, según sean las causas del despido

El acuerdo puede ser por dinero o por valores, tales como acciones de la compañía. Siempre que no exista ningún tipo de abuso por parte de ninguno de los interesados, lo cual está contemplado dentro de la ley. 

De personal común a alto directivo

Algo que es bastante usual dentro de las empresas son las promociones de cargos. Esto se refiere a un cambio en la relación laboral, pasando de tener un contrato de personal común a uno de alto directivo

Ahora bien, ¿qué sucede en ese caso, si existe un despido? Lo primero que se debe saber es que la relación laboral de empleado común no desaparece por completo, por el contrario, queda en pausa. 

Esto significa que de presentarse un despido para el cargo de alto directivo, el trabajador tiene la posibilidad de retomar su cargo como empleado común dentro de la misma empresa. Además, esto no afectaría al cobro de la indemnización correspondiente por el finiquito del contrato de alto directivo. 

Por supuesto, en caso de que la empresa no se vea en la posibilidad de regresar su antiguo puesto al trabajador, o bien no desea que así sea, deberá responder de forma legal, procediendo mediante un despido procedente o improcedente, según sea el caso. 

¿Qué sucede con un despido por decisión de la Administración Concursal? 

Un proceso de concurso tutelado por la Administración Concursal permite que la indemnización de los despidos sea determinada por los jueces a cargo del caso. Esto sin tener que obligatoriamente tomar en cuenta aquellos acuerdos establecidos en el contrato, a ese respecto. 

Para ello, se tomaría en consideración lo que ha quedado establecido en la ley para los casos de despido colectivo. Allí se establece un período de preaviso de un mes, y una indemnización de 20 días de salario, por cada año en la empresa, con un límite fijo de doce mensualidades. 

La asesoría legal es el punto clave

Para lograr salir airoso dentro de un proceso legal, siempre es más que recomendable recibir la asesoría de los profesionales dentro del área. En este caso, los abogados laborales expertos en despidos son la decisión más acercada. 

Así que, si considera que necesita ayuda para un caso de despido de alto directivo, no dude en acercarse a un despacho de abogados confiable y solicitar asesoría. 

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